Ningúnhombre es una isla, algo completo en sí mismo; todo hombre es un fragmento del continente, una parte de un conjunto. Ser humano. Pueden amar los pobres, los locos y hasta los falsos, pero no los hombres ocupados. Amor. La muerte de cualquier hombre me disminuye, porque yo formo parte de la humanidad; por tanto nunca mandes a nadie a
Dosde ellas fueron verdaderamente aclamadas en su momento: “Scent of a Woman”, que finalmente le otorgó a Al Pacino su tan merecido Oscar (aunque no realmente por esa actuación en particular), y “El Club de los Poetas Muertos”, la mejor de todas, y la que realmente hizo que esta tendencia cobrara vida. 30 años después de su lanzamiento,
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